Hoy soy fuerte.

Llevo pensando todo el día sobre que puedo contarles en cada entrada que escribo. Pero no venía nada a mi cabeza (esto del bloqueo mental es un tema!) . Busqué en mis cuadernos (tengo varios) , donde tengo miles de escritos y miles de ideas, todas revueltas que aún no logro juntar y incluso con eso, no se me hacía más fácil desarrollar algo para contarles... incluso en estos momentos que me veo escribiendo, sigo sin saber más o menos donde va encaminado esto...
Si hay algo que tengo más o menos pensado. No es que esté absolutamente en blanco, es algo que tengo desde hace un tiempo, una idea y quiero desarrollarla aquí, darle forma y tratar de hacer algo más firme y concreto. Es más fácil por este medio y como nos ayuda a todos, puede que resulte algo.. aquí va.

Llevo pensando hace muchos días en la fuerza. Esa fuerza interna que todos llevamos dentro. Esa que viene de las entrañas, la que muchos pensamos que se perdió o que olvidamos en algún rincón de nosotros, o la que muchos no sabían que la tenían, hasta que se vieron en la necesidad de ocuparla.
Eso me pasó a mi... no lo último, eso de no saber que existía. Me pasó lo primero, pensé que la muy desgraciada se me había perdido, pero andaba sólo de parranda. Resulta que en los momentos más malos, es cuando esta fuerza no me deja sola, me levanta, me ayuda y me hace seguir tirando para arriba, cuando uno piensa que ya no se puede, ahí viene la súper fuerza y te recoge cuando estás a punto de caer... muchas veces pensamos que ya habíamos tocado fondo y conocido la máxima expresión de fuerza en nuestro ser. Pero la verdad, es que somos mucho más que eso. Somos más fuertes de lo que alguna vez pensamos, más que ayer y menos que mañana... siempre nos va a sorprender y encuentro que esa sorpresa, cada vez que llega, se hace linda, amable, como un bálsamo para el alma y a la vez un tirón de orejas para nosotros por no recordar que ahí estaba escondida en uno.
También me di cuenta que a esta fuerza hay que cuidarla, no dejarla sola para que no se nos vaya. Hay que escoger día a día llevarla con uno. Hay que decir...hoy llevo fuerza en mi. Porque así lo quiero, porque así lo necesito y porque me hace bien. Porque la fuerza interior que tenemos, nos hace conocer un lado de nosotros que teníamos escondido y que es bonito sacarlo y mostrarlo al mundo...  Hoy decido ser fuerte, hoy y todos los días... Por mi, por los míos y por el que lo necesite, porque si muestro lo fuerte que soy, quizás le estamos enseñando a alguien que aún no consigue encontrar su propia fuerza a que lo logre y con nuestro ejemplo hacemos algo y nos sigue por el mismo camino? . Osea, nos ayudamos y ayudamos al mismo tiempo... Que mejor?
Mi pasito a pasito del día de hoy... llevar mi fuerza y no soltarla, ahí conmigo de la mano. Cuidarla y mostrarle al que lo necesite que si se puede. Ese es mi pasito a pasito de hoy. No olvidar que la tengo y que existe.
MI FUERZA!

Buscando a mi "yo".

Desde el mes de Agosto del año que acaba de pasar que no había estado sentada aquí escribiendo... no tenía inspiración, ni ganas. Dejé de sentir que era algo importante que tenia que hacer.
Siento que en su momento dejó de valer la pena hacerlo, por la frustración que muchas veces da saber que a muchos no les gusta leer, o la poca promoción que yo misma le doy a este blog. Me cuesta llegar a las personas, pero a las que logro llegar, muchas veces encuentran consuelo en mis palabras y es por esas mismas, que sigo escribiendo hasta el día de hoy.
También lo hago por mi misma, no solo ustedes encuentran consuelo... yo también lo hago al escribir. 
Esto a mi me ayuda mucho, me ayuda a respirar y relajarme. Es mi manera de expresar lo que siento, cuando en la vida real, en este mundo, el de las personas, el del cara a cara, soy más hacia adentro y se me hace más difícil hacerlo.
Sinceramente, creo que esta entrada, no va a motivarlos mucho, ( lo siento para el que cree que pierde el tiempo leyendo, pero no dejes de hacerlo) yo creo que la que se está motivando con esto soy yo misma. Quiero volver a traer a la "yo" de antes, esa que yo pensaba que estaba mal, pero que en realidad, no lo estaba. La "yo" de antes, era la que les escribía, la que se inspiraba con cada situación que veía o pasaba en su vida. La que los tiraba para arriba, los motivaba y la que era feliz haciéndolo... a esa mujer yo quiero volver a encontrar. Sé que vive en mi y quiero recuperarla, porque hace tiempo siento que la dejé a un lado, la aplasté y la dañé gratuitamente, me cegué y la dejé encerrada en lo más profundo de mi misma... hasta que un día me di cuenta que estaba mal, porque no había notado lo genial que era. De eso me vine a dar cuenta muy tarde, hasta que llegó la que soy hoy y perdí a la que era antes.

Muchos dicen que cuando se pierde algo, es cuando nos damos realmente cuenta del valor que tenía eso que perdimos... y eso me pasó a mi...
No se donde me fui, pero si se donde estoy y lo que quiero en estos momentos y 
por eso estoy aquí, sentada frente al computador (cosa que no hacía hace mucho tiempo) dando el primer paso para volver a ser yo pero 2.0. Recargada, distinta, más adulta y más motivada... y es por eso que hoy les escribo, porque siento que volver a hacer lo que me gusta, es un buen comienzo para volver a encontrar a la "yo" que se perdió.
Estoy recogiendo los pedacitos que quedaron y volviendo a armarme. Ese es mi objetivo principal, volver a llenar mi alma con las cosas que la "yo" de antes hacía y era feliz. Una de esas cosas es escribir.. aunque me lean muchos o no me lea nadie. Escribir es la mejor manera que yo tengo, de ser feliz, de ayudar y ayudarme.

Al principio les decía que quizás no se iban a motivar tanto con esta nueva entrada (la primera de este año), pero intentaré darle la vuelta a esto y hacerlo para todos. Para que ustedes y yo saquemos algo bueno de lo que estamos leyendo. Estoy segura que más de uno anda en la misma búsqueda que yo. Así que aquí está mi invitación a que si, por algún motivo están viviendo esto, que me está pasando a mi, comiencen a encontrarse con algo que aman. Puede ser desde lo más mínimo a lo más grande, mientras les llene su alma y logren un poquito de felicidad, entonces va a contar como punto bueno.
Cada uno sabe que es lo que le gusta y dejó de hacer y cada uno sabe, si puede o quiere volver a recuperarlo. 
Mi remedio en estos momentos es escribirles a ustedes, esa emoción de apretar el botón de "enviar" después de haber terminado de escribir, con computador en mano, con mi música en los oídos y las lagrimas en mis mejillas. Ese, hoy en día, es mi primer pasito para reencontrarme... Cuál es el tuyo?